La medicina estética es una rama de la medicina que se enfoca en mejorar la apariencia física mediante tratamientos no quirúrgicos y mínimamente invasivos. Incluye una amplia variedad de procedimientos como rellenos dérmicos, toxina botulínica (Botox), peelings químicos, y tratamientos láser. Estos tratamientos están diseñados para rejuvenecer la piel, reducir imperfecciones y mejorar la armonía facial y corporal.
El propósito principal de la medicina estética es corregir y prevenir los signos del envejecimiento, mejorar la textura y el tono de la piel, y tratar condiciones estéticas específicas como arrugas, manchas solares, cicatrices de acné y pérdida de volumen facial. Los tratamientos de medicina estética pueden ofrecer resultados rápidos y efectivos con tiempos de recuperación mínimos, lo que los hace ideales para personas con estilos de vida ocupados que desean mejorar su apariencia sin someterse a una cirugía.
Es un método no permanente que permite perfilar, hidratar y dar volumen. Sus efectos son fáciles de controlar, ya que se trata de un procedimiento intradérmico que es reabsorbido por el organismo al pasar el tiempo.
Los procedimientos estéticos son tratamientos que cambian, restauran o mejoran la apariencia.Hay muchos motivos para querer cambiar o mejorar la apariencia.
Los fines de la Medicina Estética son la restauración, el mantenimiento y la promoción de la estética, la belleza y la salud, para lo que utiliza prácticas médicas y de pequeño intervencionismo.